23 octubre 2015

Europa, tierra de asilo

Tras la Segunda Guerra Mundial, millones de personas fueron desplazadas en Eurasia. A través de la Convención sobre los Refugiados de 1951, las Naciones Unidas compartieron reasentar a los refugiados. En 1959, Europa occidental absorbió a casi un millón, EEUU a cerca de medio millón y el resto del mundo, a poco más de medio millón de personas. Ninguna nación del Consejo de Cooperación del Golfo: Arabia Saudí, Kuwait, Bahréin, Emiratos, Qatar y Omán, ha firmado esa Convención de la ONU sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951.

En 1995, fecha de la entrada en vigor del espacio europeo sin fronteras Schengen, Europa asumió a 616.000 refugiados de la extinta Yugoslavia. Alemania acogió a más de la mitad, 80.000 fueron a Austria, 57.000 a Suecia, 25.000 a Suiza, 15.000 a Francia...
Pero cuando Italia pidió ayuda a la UE ante la llegada de los tunecinos, huyendo de la primavera árabe, Francia aireó sus refugiados coloniales. La UE no discutió las normativas comunitarias relacionadas con el derecho de asilo sino el espacio Schengen. Se pasaron por el arco del triunfo los acuerdos de Dublín II, donde acordaron que el estado a donde lleguen los refugiados evaluará las necesidades. Claro, que entonces estaba en la España africana la frontera que saltaban y Bruselas se enfadaba por las pelotas de goma con las que ha sido tan generosa en Calais cuando de Francia y Reino Unido se trataba. 

@unosolosoy